QUÉ ESPERAR ESTE MES
Leo es uno de esos meses especiales en que los kabbalistas dicen que hay abundancia de energía. Los planetas indican que no hay filtros espirituales. La mayoría de los meses “comparten” planetas. Por ejemplo, Mercurio comparte su energía con Géminis y Virgo, Marte con Aries y Escorpio, y Venus con Tauro y Libra. Las luminarias, el Sol y la Luna, solo comparten su energía con un mes: la Luna comparte su energía con Cáncer y el Sol con Leo.
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El símbolo del signo de Leo es el león, y es el único mes/signo regido totalmente por el Sol. Con la calidez tanto del león como del Sol, se nos invita a prestar especial atención a los asuntos del corazón este mes, y como tal, nuestro enfoque es el amor y las relaciones. La sabiduría de la Kabbalah no está destinada a quedarse a nivel intelectual, sino a ser interiorizada profundamente en nuestro corazón. El Zóhar reitera que los secretos de este mundo se transmiten a aquellos que son “sabios en sus corazones” (Lej Lejá párrafo 96).
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CONSEJOS PARA PADRES Y MADRES
- El Sol aporta a cada uno de los planetas luz y calor, sin los cuales la vida orgánica no podría existir. Durante el mes de Leo, todos tenemos la capacidad de una increíble generosidad, compartir y cuidar a los demás, tanto a pequeña como a gran escala. A veces subestimamos lo que podemos ofrecer; nos preguntamos si es valioso, si se necesita, si es suficiente. La verdad es que no necesitamos hacer grandes gestos para tener un impacto en los demás. Simplemente tenemos que abrir el corazón y tener la disposición para amar a los demás en la medida de lo posible. Una simple sonrisa puede cambiarle el día a alguien. Busca formas de ser generoso cada día y observa cuánto amor tienes en tu corazón para ofrecer.
- Los leo son conocidos por ser líderes natos. No temen dar un paso al frente, hacer valer sus opiniones, asumir responsabilidades e inspirar a los demás. No obstante, los leo también son conocidos por tener egos legendarios que a veces pueden opacar lo mejor de ellos. Cuando el ego se involucra, los líderes buscan controlar y dominar a los demás en lugar de colaborar, apoyar y servir. El liderazgo no es algo que todos corremos a hacer, pero es algo que todos somos capaces de hacer y ser. Lo que significa ser un líder es único para cada persona y sus circunstancias de vida. Este mes, practica preguntándote: ¿cómo puedo dar un paso adelante y liderar (en mi familia, con mis amigos, mi comunidad, en el trabajo, etc.)? ¿Qué puedo hacer para asumir más responsabilidad por mi impacto e influir positivamente a los demás? ¿Dónde estoy liderando con amor o con mi ego? Observa las áreas en las que escapas al liderazgo y pregúntate por qué. Identifica los sistemas de creencias limitados que te impiden aprovechar plenamente tu capacidad de liderazgo.
- Lealtad. Esta palabra toca una fibra profunda en todos nosotros. Todos valoramos esta cualidad, y este mes tenemos la oportunidad de practicar su personificación a un nivel más profundo. ¿Cómo defines la lealtad? ¿Cómo se ve la lealtad en acción? Para algunos, la lealtad significa un apoyo ciego e inquebrantable. Para otros, puede parecerse a la disposición de dar una respuesta cruda y sincera, aun cuando es difícil. Sé sincero contigo mismo al identificar lo que significa para ti. Observa todas tus relaciones; ¿estás practicando la lealtad que deseas recibir? Y, si no es así, ¿qué te lo impide? Identifica en qué aspectos de tus relaciones quieres dar o recibir un mayor grado de lealtad. Esto podría implicar una o dos conversaciones; no huyas de estas conversaciones difíciles, acógelas. Puedes ser claro, fuerte Y A LA VEZ amable al comunicar tus necesidades, incluso cuando el tema es difícil.
- El Sol se encuentra en el centro de nuestro sistema solar, y como tal, durante este mes, todos podemos caer en la sensación de que el mundo gira o debería girar a nuestro alrededor. Podríamos ser particularmente vulnerables a tomarnos las cosas como algo personal, a exigir la atención o la aprobación de los que nos rodean, y a sentirnos rechazados o enojados cuando no obtenemos lo que creemos que nos merecemos por derecho propio. Este es un momento maravilloso para practicar el salir de nuestro marco personal y considerar genuinamente las opiniones y sentimientos de los demás. Empieza por hacer una pausa y escuchar cuando los demás hablan sin imponerte en la ecuación. Pregúntate cómo puedes ser más sensible a las necesidades de los demás. Observa lo que surge. Asimismo, cuando sientas que no estás recibiendo la respuesta que deseas de los demás, tómalo como una oportunidad para trabajar en tu relación contigo mismo. Debes ser capaz de aprobarte a ti mismo y que eso sea suficiente. Cuando vives alineado con los deseos de tu alma, te sientes orgulloso de ti mismo y pleno, indistintamente de la respuesta externa que recibas o no. Toma nota de dónde podrías estar desalineado y, en consecuencia, ser propenso a necesitar la energía de los demás.
- Los leones son conocidos por su poderoso orgullo y esa es una de las cosas que queremos evitar este mes. Todos tenemos momentos en los que pensamos que sabemos más, que tenemos razón y nos volvemos testarudos. Este mes es un buen momento para practicar el pedir ayuda, empezando por el Creador. Practica consultar al Creador tanto como sea posible. En tus pensamientos, pide al Creador que te guíe y mantente abierto a recibir esta guía, mantente abierto a nuevos caminos. También puedes practicar ser vulnerable y pedir ayuda a los que te rodean o simplemente sus opiniones, aun cuando creas que lo tienes todo resuelto. Accedemos a nuestro máximo poder y fuerza cuando somos humildes y estamos dispuestos a ser vulnerables.
CONSEJOS PARA LOS NIÑOS
- El Sol aporta a cada uno de los planetas luz y calor, sin los cuales la vida orgánica no podría existir. Durante el mes de Leo, todos tenemos la capacidad de una increíble generosidad, compartir y cuidar a los demás, tanto a pequeña como a gran escala. A veces subestimamos lo que podemos ofrecer; nos preguntamos si es valioso, si se necesita, si es suficiente. La verdad es que no necesitamos hacer grandes gestos para tener un impacto en los demás. Simplemente tenemos que abrir el corazón y tener la disposición para amar a los demás en la medida de lo posible. Una simple sonrisa puede cambiarle el día a alguien. Busca formas de ser generoso cada día y observa cuánto amor tienes en tu corazón para ofrecer.
- Los leo son conocidos por ser líderes natos. No temen dar un paso al frente, hacer valer sus opiniones, asumir responsabilidades e inspirar a los demás. No obstante, los leo también son conocidos por tener egos legendarios que a veces pueden opacar lo mejor de ellos. Cuando el ego se involucra, los líderes buscan controlar y dominar a los demás en lugar de colaborar, apoyar y servir. Como niños que somos, podría parecer que ser un líder está fuera de nuestro alcance, como si aún no fuera tu momento o no fueras capaz, pero la verdad es que todos somos capaces de liderar a nuestra manera especial. Este mes, practica preguntándote: ¿cómo puedo dar un paso adelante y liderar (en mi familia, con mis amigos, y en la escuela)? ¿Qué puedo hacer para asumir más responsabilidad por mi impacto e influir positivamente a los demás? ¿Dónde estoy liderando con amor o liderando con mi ego? Por ejemplo, si tienes un hermano menor, eres un líder cada vez que escuchas las reglas de tus padres: eres un modelo de respeto para tu hermano menor. En la escuela, si un grupo de niños se comporta de forma poco amable con otro niño y tú intervienes para apoyar al niño en lugar de unirte al comportamiento poco amable, eres un líder; estás defendiendo lo correcto y mostrando a todos los implicados cómo es la verdadera bondad.
- Lealtad. Esta palabra nos toca una fibra sensible a todos. Todos valoramos esta cualidad y este mes tenemos la oportunidad de practicarla a un nivel más profundo. ¿Qué significa para ti la lealtad? ¿Es cuando tus padres escuchan tus sentimientos y los mantienen en privado? O quizá sea cuando alguien se burla de ti y tu amigo sale a defenderte. Observa todas tus relaciones; ¿estás practicando la lealtad que deseas recibir? Y si no es así, ¿qué te lo impide? Identifica en qué parte de tus relaciones quieres dar o recibir más lealtad.
- El Sol se encuentra en el centro de nuestro sistema solar, y como tal, durante este mes, todos podemos caer en la sensación de que el mundo gira o debería girar a nuestro alrededor. Podríamos ser particularmente vulnerables a tomarnos las cosas como algo personal, a exigir la atención o la aprobación de los que nos rodean, y a sentirnos rechazados o enojados cuando no obtenemos lo que creemos que nos merecemos por derecho propio. Este es un momento maravilloso para practicar el salir de nuestro marco personal y considerar genuinamente las opiniones y sentimientos de los demás. Empieza por hacer una pausa y escuchar cuando los demás hablan sin imponerte en la ecuación. Pregúntate cómo puedes ser más sensible a las necesidades de los demás. Observa lo que surge. Asimismo, cuando sientas que no estás recibiendo la respuesta que deseas de los demás, tómalo como una oportunidad para trabajar en tu relación contigo mismo. Practica preguntarte qué puedes hacer por ti mismo para sentirte lleno de energía y feliz. Tal vez esto signifique tomarte un tiempo para hablar con alguien que quieras y compartir tus sentimientos, tal vez signifique tomarte un tiempo a solas para escribir un diario, dibujar o leer. Eres muy poderoso: siempre tienes la capacidad de llenarte de energía, no necesitas depender de nadie más para hacerlo.
- Los leones son conocidos por su poderoso orgullo y esa es una de las cosas que queremos evitar este mes. Todos tenemos momentos en los que estamos absolutamente seguros de que sabemos más, que tenemos razón y nos volvemos testarudos. Este mes es un buen momento para practicar el pedir ayuda, empezando por el Creador. Practica consultar al Creador tanto como sea posible. En tus pensamientos, pide al Creador que te guíe y mantente abierto a recibir esta guía. Mantente abierto a nuevas maneras de hacer las cosas. Literalmente puedes decirte: “¡Luz, Creador, por favor ayúdame! ¡Estoy abierto a escucharte!”. También puedes practicar ser vulnerable y pedir ayuda a los que te rodean o simplemente sus opiniones, aun cuando creas que lo tienes todo resuelto. Accedemos a nuestro máximo poder y fuerza cuando somos humildes y estamos dispuestos a ser vulnerables. Por ejemplo, puede que las matemáticas te resulten difíciles y te cueste seguir el ritmo de la clase. Te sientes avergonzado, crees que tienes que resolverlo todo tú mismo y que, de no hacerlo, eres un fracaso. En lugar de eso, hazle saber a tu profesor que tienes problemas y mantente abierto a recibir ayuda adicional, ya sea del profesor, de un tutor, de tus padres, ¡o incluso de un amigo! Observa cómo la vida se vuelve mucho más alegre cuando aceptas ayuda.
LOS 72 NOMBRES
Los kabbalistas enseñan que los 72 Nombres de Dios son instrumentos poderosos que podemos usar para alinear nuestra alma con diferentes expresiones o frecuencias espirituales de la Luz del Creador. Cada uno de los 72 Nombres de Dios está asociado con un conjunto específico de días en el calendario kabbalístico. Al conectarnos con el nombre asociado a cada conjunto de días, obtenemos conocimientos clave sobre las oportunidades disponibles para nosotros durante estos días.
- Del 1 al 5 de Av (Nun Tav Hei – Decir lo que piensas): Nuestras palabras y nuestro poder de hablar son regalos asombrosos que nos ha dado el Creador. Nos distinguimos de todas las demás creaciones de la Tierra con esta capacidad. La boca se conecta a nuestro mundo físico donde las cosas se manifiestan, y es a través del poder de nuestras palabras que en realidad podemos crear y llevar a cabo los pensamientos. A menudo, cuando nos sentimos alterados, “decimos lo que pensamos” desde un estado reactivo. En los momentos en los que te sientas impulsado a compartir lo que tienes en tu mente o en tu corazón, hazte la siguiente pregunta: ¿Lo que quiero decir me beneficia a mí, a los demás o a ambos? Expresarnos es muy importante para nuestra autoestima, pero es igualmente importante que pensemos antes de hablar y consideremos nuestro impacto en los demás.
- Del 6 al 10 de Av (Hei Álef Álef – Orden a partir del caos): Con frecuencia es durante los momentos de caos que abrimos el corazón y pedimos humildemente la ayuda del Creador, luego cuando las cosas se resuelven, experimentamos una especie de olvido y caemos en los mismos comportamientos que causaron el caos inicial. El ciclo se repite hasta que aprendemos a asumir la completa responsabilidad de nuestro caos y cambiar de verdad. Este Nombre nos da el poder de reconocer la causa a nivel de semilla de cualquier caos en nuestra vida, ya sea un sistema de creencias o un comportamiento específico, y de transformar la causa para bien.
- Del 11 al 15 de Av (Yud Resh Tav – Socio silencioso): La mayor sociedad que tenemos en la vida es nuestra alianza con el Creador. El Creador es nuestro compañero de vida y socio silencioso. Podemos pensar que somos nosotros mismos los que navegamos nuestras embarcaciones, pero en realidad es el viento del Creador el que llena nuestras velas. Aquí se nos da el regalo de la humildad para saber que dependemos de la Luz del Creador para todo lo que hacemos, y podemos centrarnos en desarrollar nuestro deseo de una alianza más estrecha con la Luz. Durante estos días, también puedes meditar en recibir la claridad y la fuerza para invitar al Creador en todo lo que haces y tener el mérito de experimentar verdaderamente la presencia del Creador de manera constante en tu vida diaria.
- Del 16 al 20 de Av (Shin Álef Hei – Alma gemela): Somos capaces de tener muchas almas gemelas a lo largo de nuestra vida; romántica, de amistad, familiar, de trabajo, etc. Somos más capaces de atraer almas gemelas a nuestra vida cuando reconocemos que no podemos realizar todo nuestro trabajo espiritual solos. Cuando despertamos un verdadero deseo de compartir con otra persona y amarla incondicionalmente, también actuamos como un imán para las relaciones de almas gemelas. Concéntrate en convertirte en un alma gemela y confía en que, al hacerlo, atraerás a las personas adecuadas a tu vida.
- Del 21 al 25 Av (Resh Yud Yud – Erradicar el odio): Despertar la espiritualidad en nuestra vida consiste en la revelación de nuestra propia Divinidad. La espiritualidad misma es el reconocimiento de que todos nosotros en esta Tierra compartimos una chispa de la Divinidad en nuestros corazones. Todo ser humano tiene bondad en su interior, a pesar de la negatividad que existe simultáneamente. El odio es una de las emociones más pesadas y negativas que experimentamos en la vida, y a menudo surge cuando estamos ciegos a algún nivel de bondad, concentrándonos solo en un aspecto o aspectos de oscuridad. El odio crea muros entre nosotros y nuestra propia esencia, así como entre nosotros y los demás. Practica reconocer dónde surgen estos sentimientos en ti y transfórmalos a través del aprecio; localiza la bondad en ti mismo o en los demás y haz que ese sea tu punto de atención. Aquello en lo que elijamos concentrarnos, ya sea en la bondad o en la negatividad, es lo que en definitiva amplificamos.
- Del 26 al 30 de Av (Álef Vav Mem – Construir puentes): Todos somos una parte de la fuerza divina conocida como la Luz creadora. Podemos parecer fragmentados, pero todos estamos conectados en nuestra esencia. Así como cada letra de la Torá tiene un propósito, también lo tiene cada persona. Y ese propósito es ayudarnos mutuamente, porque solo a través de nuestras fuerzas combinadas —la unión de todas nuestras chispas— formamos la suma del todo. Por eso es tan importante el respeto mutuo y la dignidad humana para todas las personas, incluso aquellas cuya forma de ser es diferente a la nuestra. Estamos destinados a ser diferentes; estamos destinados a ser distintos y, sin embargo, a actuar como Uno. La separación y la desunión son la desafortunada ilusión de este mundo físico. Practica identificar los lugares en tu vida en los que caes en la ilusión de la separación y esfuérzate en trabajar por una unión cada vez más fuerte.
ACTIVIDADES SUGERIDAS
- Padres: Monica Berg, en su libro Repensar el amor, comparte cómo nuestra relación con nosotros mismos es la base sobre la que se construyen todas las demás relaciones que tenemos. Para despertar, construir y mantener un amor profundo en nuestra vida, ya sea con una pareja romántica, un miembro de la familia, un amigo, un compañero de trabajo, etc., debemos amarnos primero a nosotros mismos. La manera en que nos amamos a nosotros mismos es la manera en que enseñamos a los demás a amarnos, y no podemos amarnos a nosotros mismos a menos que nos conozcamos y honremos genuinamente. HAZ CLIC AQUÍ para ver clases y ejercicios que te ayudarán a aumentar el conocimiento de ti mismo para desarrollar amor propio.
- Niños: Padres, pueden compartir la lección anterior con sus hijos y animarlos a que se concentren en estar más en sintonía con sus verdaderos deseos para despertar más amor propio. Tan a menudo como sea posible, pregúntales a tus hijos lo que piensan, sienten y quieren, animándolos a compartirlo libremente sin sentir vergüenza, y luego indúcelos a explorar formas en las que puedan honrarse y compartir consigo mismos. Por ejemplo, si a tu hijo le encantan los postres deliciosos, la próxima vez que tengas la tentación de hornear algo por ti mismo, inicia un momento para hornear juntos, de modo que tu hijo se sienta empoderado para crear para sí mismo lo que le produce alegría. Actividades sencillas como esta pueden ayudar a crear un sentimiento de amor propio en tus hijos, ya que aprenden que hacer cosas por sí mismos es nutritivo y divertido.
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