¡Feliz año nuevo astrológico a todos!
Todavía estamos en Aries, el primer mes del año astrológico y el primer signo del Zodíaco. Uno de los aspectos más fuertes de este mes es que el planeta Neptuno se mueve hacia el signo de Aries (anteriormente Neptuno estaba en Piscis). El cambio de Neptuno a un nuevo signo marca el comienzo de un capítulo épico en nuestra vida personal y en la humanidad en su conjunto. ¡Es monumental! Neptuno permanece en cualquier signo durante unos catorce años, por lo que solo podemos experimentar un nuevo ciclo de Neptuno una vez en la vida. Esto es GRANDE.
Neptuno no solo cambia de signos, sino que pasa de Piscis (el último signo del Zodíaco) a Aries (el primer signo del Zodíaco). Y está a cero grados en Aries, que posiblemente sea el más importante de todos los 360 grados, ya que marca el comienzo de todo. Para Neptuno, marca el comienzo de un nuevo ciclo de 165 años alrededor del Sol. Neptuno es uno de los tres planetas exteriores. Los otros son Urano y Plutón (y sí, sabemos que Plutón ha sido degradado, ¡pero sigue siendo significativo astrológicamente hablando!). Cuando los planetas exteriores cambian de signo, estamos hablando de cambios fundamentales que representan la conciencia generacional y colectiva, cambios que afectan prácticamente a todo el mundo.
Con Neptuno en Piscis, vimos un despertar sin precedentes en la espiritualidad. Ahora, con Neptuno en Aries (2025-2039), los vientos soplan en una dirección diferente. Como primer signo del Zodíaco, Aries es el líder; representa la libertad de acción y la libertad de la mente. Aries encarna una energía que dice “así soy yo”: soy un individuo único y voy a encontrar aquello que me hace diferente de los demás. Es posible que procuremos redefinir nuestra identidad, redescubrir nuestro propósito y asumir un papel más activo en nuestra vida. En otras palabras, ¡acción! ¡Asertividad! Y lo que es más importante, encontrar la verdadera libertad, es decir, libertad de la negatividad.
En un nivel más mundano, los países, las grandes instituciones y las naciones redescubrirán su singularidad, lo que puede dar lugar a nuevas estructuras políticas y a la redefinición de los propósitos globales y personales. Este es un momento de autenticidad y autoexpresión. Nos impulsará hacia formas radicales y nuevas de pensar en pos de la conciencia colectiva. Esto puede implicar un colapso de lo viejo, seguido de nuevos caminos de descubrimiento. Esto podría apuntar a la exploración de nuevas dimensiones de la realidad.
Con Neptuno en Aries, surgirá una mentalidad muy al estilo “hazlo tú mismo”. Aries es la cabeza, el primer signo del Zodíaco, y está regido por Marte, el planeta de la acción y la manifestación. Este es un momento para llevar nuestros sueños y visiones a la realidad. Habrá un período de ajuste. El cambio es tan poderoso que necesitaremos algún tiempo para adaptarnos a esa energía. Sé consciente de las decisiones que tomas y sé lo más auténtico posible contigo mismo.
